Las bolas chinas son una forma eficaz de fortalecer el suelo pélvico. Las pequeñas pesas vibratorias o giratorias que se encuentran en el interior de las bolas entrenan el suelo pélvico en la vida cotidiana y durante la contracción y relajación consciente de los músculos. El suelo pélvico es una capa de tejido muscular y conectivo de aproximadamente tres centímetros de espesor que tiene una influencia significativa en la vida sexual de una persona. Un suelo pélvico bien entrenado garantiza una circulación sanguínea saludable en la zona vaginal y también aumenta la sensibilidad al mismo tiempo. De este modo, las mujeres pueden alcanzar el orgasmo más rápido y con mayor intensidad. El sexo también puede ser más satisfactorio para la pareja porque la vagina se siente más apretada y firme.
Entrenamiento del suelo pélvico con bolas chinas
La persona que utilice las bolas chinas debe colocarse en una posición cómoda. A continuación, las bolas chinas deben introducirse en la vagina hasta que solo se vea la correa de extracción. Las bolas deben introducirse en dirección al cuello uterino. El lubricante puede facilitar la inserción. Las bolas están en el lugar correcto cuando ya no se notan cuando la persona está relajada. Los principiantes deben empezar con bolas que pesen menos de 70 g. Las bolas que pesan entre 70 y 100 g son adecuadas para los expertos. Las mujeres que tienen mucha experiencia con las bolas chinas también pueden utilizar bolas que pesen más de 100 g. Las bolas chinas se pueden extraer en cualquier momento con la correa de extracción flexible. Para entrenar el suelo pélvico, una persona debe usar las bolas hasta dos veces al día durante aproximadamente 15 minutos. Las bolas deben limpiarse con agua tibia y un poco de jabón suave después de su uso.
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